Levanto la vista del libro, miro la hora y me dirijo en silencio hacia el baño. Al abrir la puerta la visión me emociona, las tenues luces de las velas que se reflejan en el espejo empañado, iluminan los matices de tu cabello, que cuelga por el exterior de la bañera, el perfume de las sales de baño te envuelven, la paz se puede tocar.
Te devuelvo a la consciencia con un beso en la frente, mientras sujeto la suave toalla, al verme, te levantas con pausada elegancia, acompañada por el sonido de las gotas al caer, te quito con delicadeza algunos pétalos de rosa adheridos a tu piel.
Seco tu cuerpo con delicadeza, estamos en silencio, hablando con la mirada, entretanto recorro tu belleza y me enciendo por dentro. Te pones el albornoz con un movimiento felino y me sonríes mientras haces una trenza en tu melena. Al salir del baño sorprendida al ver la habitación, te das la vuelta y me miras de forma picarona, me acaricias el mentón, te despojas del albornoz y te tiendes en la cama bocabajo.
Sobre la cama, un masajeador de bolas y una bandeja de aceites, repartidas estratégicamente velas perfumadas por todo el cuarto. La persiana bajada, las velas y los violines dan a la habitación un aspecto de templo donde la divinidad a la que adorar eres tú.
Froto mis manos para calentarlas y las unto de aceite de azahar que me parece sedante, calmante y afrodisíaco. Lo aplico suavemente y me siento libre para frotar el aceite por la espalda, los brazos, las piernas, las nalgas, el pecho y el cuello. Todas mis terminaciones nerviosas acarician tu cuerpo, mi fuego interior aumenta al son de tus diminutos gemidos. Con las yemas de mis dedos separados rastrillo tu piel con líneas ondulantes alrededor de tus pechos como en un jardín zen , sería una visión para la meditación, sino fuera por la alta carga de sensualidad que tiene. Voy bajando la intensidad del masaje adaptándolo a tu respiración que cada vez es más sosegada.
Levanto las manos las manos, al sorprenderme tu idilio con el dios Morfeo, me levanto con suavidad y te tapo con la sabana. Te vuelvo a mirar ya desde la puerta antes de apagar las velas y tengo la tentación de despertarte… estás tan bella.
Me bebo las ganas con una copa de vino blanco, mientras busco separador del libro. Niego con la cabeza en silencio y con una sonrisa, maldiciendo mi suerte, pero con la absoluta convicción que mañana será un gran día.
...traigo
ResponderEliminarecos
de
la
tarde
callada
en
la
mano
y
una
vela
de
mi
corazón
para
invitarte
y
darte
este
alma
que
viene
para
compartir
contigo
tu
bello
blog
con
un
ramillete
de
oro
y
claveles
dentro...
desde mis
HORAS ROTAS
Y AULA DE PAZ
COMPARTIENDO ILUSION
CLELICAR
CON saludos de la luna al
reflejarse en el mar de la
poesía...
ESPERO SEAN DE VUESTRO AGRADO EL POST POETIZADO DE
MASTER AND COMMANDER, LEYENDAS DE PASIÓN, BAILANDO CON LOBOS,
THE ARTIST, TITANIC SIÉNTEME DE CRIADAS Y SEÑORAS,
ENEMIGOS PUBLICOS HÁLITO DESAYUNO CON DIAMANTES TIFÓN
PULP FICTION, ESTALLIDO MAMMA MIA, JEAN EYRE, TOQUE DE CANELA Y
STAR WARS...y más.
José
Ramón..